miércoles, 30 de noviembre de 2011

Don Álvaro a la fuerza del sino.

ESTUDIANTE.-  Y dígame usted, ¿de dónde salió usted esta mañana, de Posadas o de Palma?
TÍO TRABUCO.-   Yo no sé sino que tarde o temprano voy al cielo.
ESTUDIANTE.-   ¿Por qué?
TÍO TRABUCO.-  Porque ya me tiene usted en el purgatorio.
ESTUDIANTE.-    (Se ríe.)  ¡Ah, ah, ah!... ¿Y va usted a Extremadura?
TÍO TRABUCO.-  (Se levanta, recoge sus jalmas y se va con ellas muy enfadado.)No señor, a la caballeriza, huyendo de usted, y a dormir con mis mulos, que no saben latín, ni son bachilleres.