domingo, 13 de marzo de 2011

BANG

El dolor es extraño. Un gato que mata a un pájaro, un coche accidentado, un incencio... llega el dolor, BANG, y allí está, se introduce en ti. Es real. Y para cualquiera que te vea, parecerás un imbécil. Como si te hubiese caido una idiotez repentina. No hay cura para ello mientras no encuentres a alguien que comprenda cómo te sientes y sepa cómo ayudarte.